Hay quien dice que Elizabeth Taylor nunca se tomó el matrimonio muy en serio. Otros piensan que demasiado… Sea como sea, a nadie dejó indiferente. No una, ni dos, sino ¡ocho veces! dijo esta reina del cine: “Si, quiero”.
Pero una cosa en segura, Taylor hizo enloquecer a la prensa y el público de su tiempo con cada una de sus bodas. Una boda por todo lo alto y ante los medios de comunicación o de manera más íntima; una boda secreta o una boda por duplicado, pero siempre, al más puro estilo Hollywood.
Hoy en el Cigarral del Ángel Custodio, en Toledo, repasamos las ocho bodas de Elizabeth Taylor.
En 1950, con 18 años, se casó con Conrad Hilton Jr., millonario hotelero y tío abuelo de la mediática Paris Hilton, en la iglesia del Buen Pastor de Beverly Hills. Su matrimonio sólo duraría 7 meses, pero el enlace, al que acudieron más de 700 invitados y que fue descrito como «la boda de las bodas» se convirtió en el acontecimiento social del año en Hollywood.
Sólo tenía 20 años cuando contrajo matrimonio, por segunda vez, con Michael Wilding, un actor británico con el que tuvo dos hijos. En esta ocasión, el matrimonio duro cerca de cuatro años.
Su tercer matrimonio fue en 1957 con el productor de cine Mike Todd. Esta vez la ceremonia tuvo lugar en el puerto de Acapulco. Con él tuvo a su tercera hija, Elizabeth Frances. Desgraciadamente la actriz enviudó un año después.
En 1959, contrajo matrimonio con el cantante Eddie Fisher, protagonizando uno de los escándalos más sonados de aquella época, ya que él estaba casado con la mejor amiga de la actriz, la famosa Debbie Reynolds. Además, Eddie era amigo de su tercer marido. Eddie Fisher era judió y a principios de ese mismo año Elizabeth se convirtió al judaísmo. Su enlace tuvo lugar en el Templo Beth Shalom en las Vegas. Una boda tradicional judía que incluyó la jupá y la firma de la Ketubá.
En 1964 contrajo matrimonio, por quinta vez, con Richard Burton. Este fue el matrimonio más largo de la actriz que, en varias ocasiones, afirmó “amarlo locamente”. Se divorciaron en 1974 y sorprendieron a propios y extraños casándose de nuevo en 1975, en una ceremonia secreta en África. Un año después estaban de nuevo separados.
Su séptimo matrimonio fue con el senador republicano John W. Warner. El enlace tuvo lugar en una finca, propiedad de Warner, donde celebraron una preciosa ceremonia al atardecer. Un matrimonio desafortunado que arrastró a la actriz a una espiral de infelicidad y alcoholismo.
Y llegamos así a 1991, año del octavo enlace. Esta vez con Larry Fortensky, un obrero de la construcción a quien había conocido en el Centro Betty Ford durante una cura de desintoxicación. Contrajeron matrimonio en el Rancho Neverland de Michael Jackson en 1991 y terminaron divorciándose en 1996.
Ya lo veis ¡TODA UNA HISTORIA DE HOLYWOOD!